Este siglo necesita urgentemente personas con empatía (se ponen en el lugar del otro) y que tengan cierta sensibilidad ante los problemas. A pesar de estar bombardeados de noticias en televisión, hemos de seguir humanizados e incluso diría yo, sería muy recomendable estar más humanizados que nunca.

Es prioritario cambiar lo que no funciona. Los héroes de barro y los programas basura no ayudan a los jóvenes. Necesitamos más programas tipo «master chef» donde las personas de distintas edades tuvieron una oportunidad para lograr sus sueños.

No hay que soñar la vida, sino vivir tus sueños. Vacúnate contra la indiferencia.